Recorrido por 10 conjuntos de hórreos en Galicia

Seguro que estamos acostumbrados a ver hórreos de uno en uno, cerca de las casas o de las iglesias, pero a veces encontramos grupos de hórreos en zonas aireadas, en pendientes, cerca de caminos, casi a la orilla del mar… En algunas aldeas, las casas están muy juntas, y esta es una fórmula para que los productos que se conserven tengan suficiente ventilación. Muchas veces, estos campos de hórreos, los eirados, funcionaban con un sistema de turnos, como pasaba con los molinos. En otras ocasiones, ya con el desudo de los hórreos y debido a cambios en el urbanismo de las aldeas, son donados por los vecinos, para ahorrar espacio y evitar su deterioro. En todos los casos, son un valioso testigo de nuestra tradición.

Pero, ¿dónde se encuentran los grupos de hórreos más grandes? En las cuatro provincias hay buenos ejemplos. Aquí mostramos 10 conjuntos de categoría:

  1. A Merca (Celanova, Ourense). Estamos ante la concentración de canastros, que es como les llaman en la zona, más grande de Galicia. Hasta que no se tienen delante, cuesta imaginarlos, pues son nada menos que 34, todo un bosque de canastros. Están en una pendiente en el Camiño da Feira. En este caso, la disposición en conjunto se debe a la donación de los vecinos en los años 70 del pasado siglo. Están rehabilitados y, desde hace años, podemos disfrutar del área de recreo y el parque infantil instalados al lado de ellos.
  2. Combarro (Poio, Pontevedra). En Combarro hay mucho hórreo, que en la zona llaman palleira. Casi todos están desperdigados por el pueblo, pero justo en la línea de costa, bañados por la ría de Pontevedra, encontramos una serie de ellos, tan al borde que, cuando hay pleamar, el agua les moja los pies. Unos 30 están dispuestos de este modo. Si los sumamos al resto del pueblo, tan bien conservado, tenemos una estampa memorable.
  3. Piornedo (Cervantes, Lugo). Estes horros (los hórreos allí) están en plena montaña, en Os Ancares, a más de 1.000 metros, en la parroquia de San Fiz de Donís. Aquí, tradicionalmente, las casas antiguas (las pallozas) tiene un horro. En esta zona son de planta cuadrada, elevados sobre cuatro pilares, con cámara de madera y cubierta de paja. Son semejantes a los asturianos, menos en que estos últimos tienen galería. Además de para almacenar grano, se usaban para guardar carne de cerdo, pan, ropa…
  4. Quins (Melón, Ourense). Estos están situados en un alto en el centro de la aldea. Hay 24 canastros, el nombre de la zona, dispuestos en un grupo de 10 y otro de 14, al lado de un viacrucis y de la iglesia. Entre los dos grupos, dos cruceiros, que recuerdan a las cruces del Calvario. Los canastros son mixtos, de madera y piedra, algunos de cuatro pies y otros de seis. La cubierta es de teja, y no se conservan cruces ni adornos.
  5. Amoeiro (Ourense). En la plaza de O Campo da Igrexa, enfrente de la iglesia y la rectoral, en la otra orilla de la carretera, al lado del cruceiro, se agrupan 12 canastros. No son todos iguales, algunos tienen estructura mixta, con piedra y madera, y otros tienen la cámara toda de madera, y los hay con cepas de piedra y otros con pies. Por otro lado, unos están restaurados y otros muy deteriorados.
  6. Zorelle (Maceda, Ourense). Aquí hablamos de Se juntan 7 al lado de la iglesia de Santiago de Zorelle. Todos tienen pies de piedra y cámara de madera, menos uno, que cuenta con piedra en la cámara también. El tejado, a dos aguas, de teja del país. La mayoría han sido rehabilitados.
  7. Barroso (Avión, Ourense). En una zona bien aireada en la parroquia de Santa Baia, en el lugar de Barroso, se agrupan hasta 29 hórreos. Son todos de piedra y madera. A diferencia de la mayoría, el tejado, a dos aguas, también es de granito. ¡Despensa más fresca no hay!
  8. Eira Grande (Cercedo-Cotobade, Pontevedra). En la parroquia de Santo Estevo de Pedre, de tradición de canteros, ya lo vemos por el nombre, encontramos este conjunto de 8 canastros, al lado de la iglesia barroca y de los cruceiros. Todos son de piedra y madera, con cubierta de teja o piedra. Se trata de hórreos de tipo amaián, con cámara mixta y apoyados en cepas. Cerca de esta era está la Eira do Pallal, con 5 canastros más, donde se majaba el centeno.
  9. Eira da Ermida (Cercedo-Cotobade). Sin salir del municipio de Cercedo-Cotobade, en el valle del río Queireza, cerca de la iglesia de los Remedios, de la fuente, del cruceiro, y de los restos de un palomar, hallamos este conjunto de 12 canastros.
  10. Bornalle (Muros, A Coruña). En la parroquia de Abelleira, hay 22 hórreos en pequeños grupos. Están en un campo a poca distancia de la playa de Bornalle, al fresco del viento marero. Casi todos son de tipo Noia, con sillares de granito y ranuras horizontales. La mayoría carece de adornos en lo alto de la cubierta.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *